Una mujer con dos niñas camina por la calle de piedra... las dos niñas se entretienen conversando con ella, parece increíble, la facilidad de relacionarse de la infancia, con la dulzura con que ella las trata, consigue que la acción se desarrolle de manera natural y encantadora.Laura Tonini, llegó la noche del sábado a Villa Allende para el rodaje de la última escena del corto. Después de una larga espera, y de haberse transformado en un personaje de época, vistiendo pollera y piloto al estilo de "Casablanca", tomó de la mano a las dos niñas y paseó una y otra vez por el callejón como si fuera su madre realmente. Entre tímida y silenciosa, y a su vez predispuesta y simpática, nos ayudó muchísimo, estando atenta a todo lo necesario. Buscábamos polvo de maquillar para Federico, y Laura buscaba en su bolsillo y tenía lo que precisábamos.
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