Digo <<¡acción!>> y por la calle de piedra, mojada después de una lluvia de mentira, caminan tres mujeres... dos pequeñas y su madre... los tapados y ropajes de época bailan. Julieta deja caer su muñeca a la mitad de la calle, las tres continúan caminando y sus súplicas por volver por la muñeca se van con ellas fuera de cuadro... <<¡Corte!>> y las gemelas ya hicieron su trabajo.
Julieta y Lucía Moyano Velez tienen 6 años. Al principio dudamos en hacerlas actuar, por la coplejidad de la escena.
Era de noche, hacía frío, la iluminación no es una cuestión sencilla... pero me encanta trabajar con chicos.Igualmente trasladamos el día de rodaje a septiembre, confiando en que el frío iba a ser menos intenso... No obstante, la noche del 1 de septiembre comenzó algo cálida y terminó enfríandose, el rodaje se demoraba, las chicas actuaban con una naturalidad impactante, pero algunos inconvenientes hicieron que las horas se pasaran cada vez más rápido.A pesar de todo esto aguantaron y demasiado, en un mundo como el de las personas que estamos aprendiendo a hacer cine, que todo parece susceptible de caerse en pedazos en cualquier momento, puede salir todo a la perfección o no precisamente.
Aquella noche, el frío se hizo sentir con la demora de las correcciones de iluminación y nos vemos en situación de disculparnos con ambas, un par de actrices encantadoras, y también de agradecerles enormemente la posibilidad de tenerlas, a sus padres, que estuvieron constantemente en el lugar. A veces, las disculpas no alcanzan y los presentes tampoco para devolver todo lo recibido, pero, si todo continúa su rumbo, no quiero perder la oportunidad de verlas allí, en primera fila, el día de la muestra.
1. Lucía y Julieta de mano de Laura, su madre de ficción.
2. Ricardo (Martín Fernández) le devuelve su muñeca a la niña (Julieta Moyano Vélez).